La llegada de una base militar estadounidense transforma para siempre la vida de los habitantes de Trujena. La tierra cultivada durante generaciones se convierte en asfalto, los jornaleros pasan a ser obreros mal pagados o simples espectadores del auge de un mundo que no les pertenece. Pedro Infantes, testarudo y orgulloso, se aferra a su parcela con la convicción de que resistir es su última forma de dignidad, pero el destino le arrastra, implacable, hacia la derrota.
Pedro Infantes se enfrenta a la maquinaria del progreso con la terquedad de quien solo conoce una forma de vida, mientras a su alrededor la resignación se impone. Unos emigran, otros aceptan el dinero que les ofrecen y se reinventan como camareros, alba?iles o prostitutas en la nueva econom¡a que florece al amparo de los soldados extranjeros. Las tabernas se llenan de risas forzadas y canciones en un idioma que no entienden, mientras las promesas de compensación y justicia quedan en discursos vac¡os que nadie escucha.
Luisa Isabel Alvarez de Toledo retrata con crudeza y lucidez el choque entre dos realidades irreconciliables, donde el progreso es un fenómeno ajeno que llega sin preguntar, y la supervivencia se convierte en una lucha contra el olvido. Medio siglo después de su publicación, La Base sigue siendo una novela vigente, una historia de desarraigo y pérdida, de resistencia inútil y de la descomposición silenciosa de un mundo que desaparece sin ruido, pero para siempre.