Lo más original de la guerra civil española fue el experimento social, espontáneo e improvisado que conocemos con el nombre de colectivización. En los años sesenta, cuando se habló mucho de lt autogestión, la experiencia acumulada por los colectivizadores parecía que podría ser útil a los autogestionarios. Pero la sociedad evolucionó en otra dirección y las aspiraciones de unos y las realizaciones de otros se olvidaron. Al calor de la ilusión autogestionaria el autor de este libro entrevistó, grabadora en mano, a diversos militantes que habían dirigido colectivizaciones durante la guerra civil. Contaron su historia personal, como prólogo al relato de su actuación de colectivizadores. Hoy, estas entrevistas -perdidas durante años y ahora redescubiertas - pueden ayudar a comprender lo que, de la guerra civil, queda como más creador y que, sin duda, algún día, en el futuro, será el precedente de cosas que vendrán.