El apoyo incondicional que la Primera Internacional ofreció a los insurgentes encabezados por Ignacio I. Madero, en el inicio de la Revolución Mexicana de 1910, fue motivo para que un anarquista español, que participó activamente en la Semana Trágica de Barcelona (1909), se viera envuelto en el traslado de un alijo de armas con destino a los anarquistas mexicanos. Sus ideales libertarios y su habilidad en el manejo de explosivos, luchando como mercenario junto a las tropas de Pancho Villa, le ganó el apelativo de El Dinamitero con el que fue ampliamente conocido entre los partidarios de la Revolución. Basado en la información recopilada por su nieto, el autor nos conduce a través de un apasionante recorrido por los hechos y personajes que convirtieron la Revolución Mexicana en un mito del siglo XX. Porfirio Díaz, Madero, Huerta, Pancho Villa, Emiliano Zapata y tantos otros, aparecen en esta narración como telón de fondo de las actividades llevadas a cabo por El Dinamitero a lo largo de cinco años, cuyo relato no dudamos atrapará la atención del lector por su amenidad e interés.